sábado, septiembre 16, 2006

en el camino...



Si alguien me pidiera rápidamente una manera de resumir el cómo vivo, se me ocurre, pues, la imagen de este vídeo. Es que el modo de caminar en él es aquel por el cual he optado. Lo digo tanto en sentido figurado como en el literal...por la calle, día a día, es así.
Sí, es así como camino en medio de la ciudad y las masas. En el campo o en la playa, no corre.
Caminar manteniendo la línea...no salgo tan mal parada de tanto choque (mido 1 metro 76 y soy dura...no sólo de cabeza, además sé patear muy fuerte a la canilla).
Ya veis, así es...
y perdón a los que me han pedido un post más extendido, pero lo enviaré entre hoy y mañana (me refiero al que responderá a Erdosain y a mi querida Checha. También a Naty, por cierto)...
Gracias por los mails.
Además, ¿no es mi vida una especie de sinfonía agri-dulce?...

10 Comments:

Blogger Unknown said...

Cada uno decide que sinfonía poner, o al menos trata...

6:24 p. m.  
Blogger Amaranta said...

Estimado Ary: ¿fuiste tú quien me envío la dirección de la pagina de fotografía?...

7:08 p. m.  
Blogger Natalia J. said...

cuando camino así, en línea recta, es cuando estoy peleada con el mundo. De lo contrario, zigzague nomás!

besos!

8:59 p. m.  
Blogger Amaranta said...

mi querida Apo, llevo marcado a sangre y fuego de nacimiento el estar peleada con el mundo...

9:00 p. m.  
Blogger La Oveja said...

a veces me agara la ashcroft-actitud al caminar por la ciudad, aunque no me lleve tanta gente puesta: soy medio mas peque de tamaño... pero tengo cara de ¡que se corran los demas!

11:04 p. m.  
Blogger Poéticamente Insurrecto said...

Aunque no me lo vaya a creer, ese video, en su momento, marcó todo un estilo de caminar que luego supe mantener; yo quería ser Ashcroft pasandole por arriba a todo.

Y al igual que en el caso de Apo, vuelve cada vez que estoy peleado con el mundo; situación que se repite solamente cada vez que sale el sol.

2:55 a. m.  
Blogger Unknown said...

En mi pueblo-ciudad se puede mantener la línea recta sin chocar a nadie, pero cuando voy a capital me gusta pensar que estoy en una especie de juego en el que pierdo si alguien me toca, así que sin perder la velocidad me deslizo entre los espacios que deja la gente.
Ahora que me doy cuenta, cuando no estoy en capital también suelo pensar que si la gente me toca voy a perder el juego.
Triste.

10:17 a. m.  
Blogger Amaranta said...

quizá el juego esté en guardar la distancia y ser tocada y conmovida por la tan inexpugnable lejanía con los otros...

12:49 p. m.  
Blogger Delirante said...

It's a bittersweet simphony, reza la canción.

Creo que está bien, ir así por la vida, casi sería una manera de salir ilesa de tanta dificultad, no?

Saludos :)!

3:25 p. m.  
Blogger Amaranta said...

buen punto, gise!
Para mí ocurre como en la psicología de los atomistas antiguos, toco lo que nos sucede, nos toca, nos afecta: de ahí que asuma el verso:
"que ahora me sé frágil y eso me hace fuerte"
Así, tiendo a proseguir la decisión y busco incluso el choque...
más que slir ilesa tiendo a asumir que el cuerpo es receptor.
De ahí también la auto-exhortación.
"tornarme vulnerable incluso al aire".

3:42 p. m.  

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